A los pocos días de comenzar este 2022, Rafael Figuerola Córdoba,
'Rafa Figuerola', comentó a patiodecuadrillas.es, que tenía tomada la decisión que este año "va a ser mi
última temporada", por aquello de cumplir la edad para su jubilación.
Aunque tenía alguna fecha más dada para torear, "no me arriesgo a hacer el paseíllo", ya que va a tener que volver a visitar una vez más, tras una revisión periódica, a un especialista, para buscarle una solución a sus maltrechas rodillas
(ha sido operado en 3 ocasiones en la derecha y 1 en la izquierda), que "posiblemente habrá que operar, para reparar meniscos, y ver alguna solución para la falta de cartílago", por lo que ha tenido que poner punto y final a su carrera, de una manera callada, como él siempre ha querido que se produjera.
Esta temporada de despedida, ha sido "muy buena. Estoy muy satisfecho con ella. En la vida me podría esperar que fuera tan bonita". Y de los muchos recuerdos que le vienen a la cabeza de este 2022, cabe destacar el brindis
que le hizo por sorpresa, Rafael Reyes, el pasado 28 de agosto, cuando actuaba a sus órdenes, de la faena de 'presentación'
del novillero con picadores cordobés en Las Ventas (en la imagen, cuadrando en la cara antes de colocar un par de banderillas, ese día).
El curriculum
de 'Rafa Figuerola',
es extensísimo. Así, su primera actuación de luces fue en la plaza de toros del pueblo de su madre, Cabra (Córdoba), en el año 1987. Y de su trayectoria como torero de plata, tiene el honor y orgullo de "haber toreado con todos los matadores de toros, nacidos en Córdoba".
Pero, de este torero con un enorme corazón, cargado de humildad, y de un prestigio inconmensurable entre todas las
'gentes' del toro. Y fuera de él, yo destacaría, que todos los que los tenemos entre nuestra reducida lista de amigos, siempre hemos podido, de verdad, confiar en él, incluso en el caso de aquellos que lo conocían poco. Es un tipo responsable, que nunca ha jugado con los sentimientos de nadie. En definitiva: 'una buena persona'.
Amigo, sólo nos me queda desearte una pronta solución a tus maltrechas rodillas, y darte nuestra mas sincera enhorabuena
por el nuevo estado en tu vida, que acabas de comenzar, no sin antes dedicarle un
brindis
al cielo dedicado, -si me lo permites-, a mi
'pariente', que seguro que está muy satisfecho de tu dilatada labor en el toreo.